Un didáctico inicio del Ciclo de Música de Cámara "OSSLA para todos", en el MASIN

*Dos grupos de cámara de la Orquesta Sinfónica Sinaloa de las Artes, tocaron e interactuaron con los asistentes

 Culiacán, Sin.- Con un concierto realizado con toda informalidad, de corte didáctico, y en el que se interactuó con el público, que pudo hacer las preguntas que quisiera, abrió en el patio del Museo de Arte de Sinaloa el ciclo de música de cámara “OSSLA para Todos”, con un numeroso público que aprovechó la invitación a hacer preguntas y que disfrutó cada una de las participaciones.

La bienvenida estuvo a cargo del Mtro. Miguel Salmón del Real, director artístico de la Orquesta Sinfónica Sinaloa de las Artes, quien dio pormenores de lo que es la música de cámara que, a diferencia de la música orquestal, se realiza en pequeños salones para un publico selecto que antaño era la nobleza.

Expresó que, a partir del siglo 20, la música de cámara combina una gran variedad de sonidos, de todos los colores y sabores, e invitó al publico a participar haciendo preguntas o comentarios sobre lo que escuchaban, y sobre todo a conocer a los músicos de la OSSLA que es una de las mejores orquestas de México y está en Culiacán.

Fue Anthony Veloz, ejecutante del corno y miembro de los dos ensambles presentados, quien estuvo haciendo comentarios a las piezas presentadas y contestando de las preguntas e incluso se hicieron demostraciones de algunos instrumentos, sobre todo de percusiones, con sus nombres y procedencias.

En su concierto de apertura, se presentó en primer término, el Pequeño Ensamble de Metales, integrado por Jesús Antonio Flores Díaz en la trompeta; Alejandro Román Villagómez y Sebastián Hernández en los trombones, y Omar Morales y Anthony Veloz en los cornos, para interpretar las piezas “Bankelsangelieder”, de autor anónimo, “Danzas”, de Tilman Susato; “Notturno”, de Nikolai Rimsky-Korsakov; “Toreador song”, de Georges Bizet y Irons, y “Mexican folk”, de Bert Mayer (esta última, un popurrí con “Cielito lindo”, “La cucaracha” y “Jarabe tapatío”).

Luego el Grupo Experimental, integrado también por Anthony Veloz y Omar Morales en los cornos; Arturo Ordoñez Kelly en el bajo; Luis Alejandro Inda, Paúl Bernal y Aníbal Ochoa (músico invitado) en las percusiones, y al piano, Hernán Vega (músico invitado).

Ellos interpretaron una serie de piezas con aires latinos y negra estadounidense, como son “Entrada a Cumanacoa”, de Daniel Maíz (adaptación de Javier Rosa), “El frutero”, de Alberto Muñoz (adaptación de Javier Rosa); “Trío experimental   Nos.  1, 3, 7 y 8”, de Lowell E. Shaw; “Autumn Leaves”, de Jacques Prévert y Joseph Kosma; y “Blue in Fa”, de Ricardo Matosinhos (adaptación de Javier Rosa).

En general, fue un concierto ameno, lleno de enseñanzas y cálido por la sencillez mostrada por los músicos, que bajaron de su pedestal para platicar con los asistentes.

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