Gran noche con el estreno de “Así canta Sinaloa para el mundo”

*Un meteórico viaje por la canción popular sinaloense, en el TPV, bajo la dirección de Lázaro Fernando

Culiacán, Sin. – Una noche de canto, danza folclórica y contemporánea en sana convivencia, con teatro tipo carpa o cabaret y hasta algo de acrobacia, vivieron los asistentes la noche del viernes al Teatro Pablo de Villavicencio al estreno del espectáculo “Así canta Sinaloa para el mundo”, creación y dirección de Lázaro Fernando Rodríguez, a cargo de un selecto grupo de artistas de la localidad.

Participaron la mezzosoprano Oralia Castro, el tenor Ricardo Rodríguez y el actor David Zatarain como el conductor ruso “Davidnov Zatarainovski”, así como la Orquesta “Los Amos de la Noche”, y las compañías del ISIC: Coro de la Ópera de Sinaloa, Danza Joven de Sinaloa y la Compañía Folclórica Sinaloense.

“Así canta Sinaloa para el mundo” constó de una veintena de canciones, la mayoría compuestas por autores sinaloenses y con fama internacional, desde el vals de principios del siglo 20, “Alejandra”, del mazatleco Enrique Mora, al “Adiós de Carrasco”, del culichi Alfredo Carrasco, pasando por el bolero “¿Por qué no he de llorar”, del mazatleco Fernando Valadez, y “¿Quién será?”, del mochiteco Pedro Beltrán Ruiz.

Con una conducción caracterizada por un buen sentido del humor, por un “Davidnov" que agarra pleito casado con el tenor en sus coqueteos con Oralia, y con los “músicos del Mercadito” por desafinados, cantaron también rancheras de rompe y rasga como “El Capiro”, de Luis Pérez Meza, y el corrido “Los caballos que corrieron”, de Miguel Jacobo Olguín.

También canciones más modernas: Oralia Castro cantó “Osito Panda”, una canción infantil de los 80 que hizo famosa Yuri, y que es autoría -y pocos lo saben-  de la mazatleca Laura Gómez Llanos Barraza, autora además de “Esta noche la paso contigo”, un viejo éxito de Los Ángeles Negros, y de “Y te voy a enseñar a querer”, que cantó Oralia Castro y que hizo famosa en los años 70 la portorriqueña Manoella Torres.

De más acá en el tiempo, del angosturense Espinoza Paz, Ricardo Rodríguez cantó “Un nombre normal”, y de Ana Gabriel, de Guamúchil, Oralia cantó “Demasiado tarde” y luego cantó el éxito juvenil ochentero “Me enamoré de ti en un bazar”, del culichi Jesús Monárrez.

Del sinaloense por adopción Víctor Franco, Ricardo cantó “Un amor en el olvido”, y aunque no componían, se hizo un homenaje a dos grandes cantantes sinaloenses, con “Besos y copas”, de Víctor Cordero, que la guasavense Chayito Valdez hizo famosa, y la versión de “El barzón”, de la cantante culichi Amparo Ochoa.

Del cantautor guasavense David Aguilar se retomó la letra que le puso a la canción “El niño perdido”, en la voz de Ricardo, quien luego cantó “Te hubieras ido antes”, de Luciano Luna, de Guamúchil, y de Josh Favela, de Caitime.

No podían faltar Enrique Sánchez Alonso “El Negrumo”, con su danzonete “Culiacán”, y José Ángel Espinoza “Ferrusquilla”, de Choix, con “Échame a mí la culpa”, esta cantada por Oralia y Ricardo en uno de los mejores momentos de la noche.

Cerró con el tema “La tambora sinaloense”, de Faustino López Osuna, originario de Concordia y autor además del Himno de Sinaloa, cantada esta con todo el elenco, dancitas y hasta una acróbata colgada de un aro en lo alto del escenario. La reacción del público fue apoteósica, entre aplausos y vítores, ante lo cual, como pilón, los artistas cantaron “Quisiera amarte menos”, del mochiteco Memo Lugo.

Para quienes no pudieron ir, o desean repetir, una segunda función de este espectáculo se ofrecerá el próximo viernes 4 de marzo, a la misma hora y lugar y siguiendo todas las medidas de sanidad recomendadas.

Además de los mencionados, participaron en el trabajo creativo la maestra Olimpia Chávez, directora de la Compañía Folclórica del ISIC, y el coreógrafo Yahir Padilla; Carlos Zamora, coreógrafo y director de Danza Joven de Sinaloa, Edylin Zatarain, coreógrafa, y el barítono Marco Antonio Rodríguez, director del Coro de la Ópera de Sinaloa.

Integran la Orquesta “Los Amos de la Noche”, los miembros del Cuarteto San Miguel, así como destacados músicos de la localidad, como son Óscar Melchor Ávila en la dirección musical y en el bajo; Félix Alberto Aragón en los teclados; Raúl Alfredo Carrasco en el requinto; Pablo Osuna Avilés en la guitarra; Diego Rojas en las percusiones; Carlos Cázares en el sax alto, y Mario Alvarado en la trompeta.

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